El Comando Unificado Pataz (Cupaz), un esfuerzo conjunto de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional del Perú, ha asestado un golpe significativo a la minería ilegal en la región. La operación militar, denominada “Ñitiq Anka”, se llevó a cabo en Pampa Grande Alta, generando pérdidas superiores a los S/ 1.3 millones para las mafias delictivas.
La intervención resultó en la destrucción de la infraestructura clave utilizada por estas organizaciones. Entre los resultados más destacados se encuentran:
Además, las autoridades confiscaron una gran cantidad de materiales y equipos utilizados en las actividades ilícitas, incluyendo explosivos, motores y maquinaria.
Con esta operación, el Cupaz reafirma su compromiso de proteger el medio ambiente, restaurar la seguridad y devolver la tranquilidad a la población de Pataz.